El eslogan es, desde luego, impactante. Hacer de Alicante el Silicon Valley del Mediterráneo es algo a lo que nadie en la ciudad levantina diría que no, ya que nadie desconoce las virtudes de convertirse en un polo tecnológico de primer orden.
Es la idea con la que se ha inaugurado hace unos días (el tres de julio, para ser exactos) el Centro de Tecnologías Avanzadas de Alicante, de la mano de Accenture, el gigante tecnológico que copa en torno a un 10% del mercado mundial de la contabilidad distribuida, la DLT (tecnología habitualmente conocida como blockchain).
Este centro, en el que ya trabajan 85 especialistas, cuenta con 2700 metros cuadrados en sus instalaciones, ubicadas en el flamante Distrito Digital de la ciudad. Forma parte de la red internacional de la compañía y está orientado, ante todo, a la colaboración entre equipos y empresas con intereses tecnológicos comunes.
El silicio alicantino
En su nota de prensa, Accenture nos cuenta por qué se ha fijado en la capital alicantina para ubicar su ATC Pierre Nanterme (el nombre oficial del centro): dos universidades tecnológicamente punteras en los alrededores, una ubicación estratégicamente envidiable y todas las facilidades institucionales para implementar el proyecto.
Huelga presentar a Accenture. Con más de medio siglo de trayectoria trabajando en la intersección entre tecnología y negocios, y con presencia en más de cuarenta industrias distintas (si bien el Fintech es hoy por hoy el epicentro de su actividad), no pueden pasar desapercibidos en la comunidad blockchain. En nuestro blog tampoco nos son desconocidos.
Los ámbitos tecnológicos a desarrollar se reúnen en el acrónimo DARQ: DLT (o blockchain), AI, realidad extendida y computación cuántica (quantum computing). En cuanto a cadenas de bloques se refiere, destacan los casos de la trazabilidad de contratos bursátiles en la Bolsa de Tel Aviv o la app ReACH, aunque en Alicante resultan muy atractivos los desarrollos como Aitana (un bot turístico) o los desarrollos en RV destinados a servicios hoteleros.
La prensa no ha dejado de hacerse eco de la noticia (para muestra, un botón), y las esperanzas puestas por todos en este centro para la dinamización de la economía de la región son muchas. Ciertas tecnologías han pasado de ser un complemento a convertirse en la médula espinal de numerosos negocios. La flexibilidad y capacidad de adaptación de las empresas del futuro en estas cuestiones marcará la diferencia entre el éxito y el fracaso.
FUENTE IMAGEN DE PORTADA: alicanteplaza.es