La gestión del consumo y las transacciones energéticas es uno de los horizontes dorados de la tecnología blockchain, uno de los aspectos de nuestra realidad cotidiana donde la DLT podrá dar más de sí y ofrecer ventajas de lo más tangible: un importante abaratamiento de nuestra factura eléctrica.
De hecho, los casos de aplicación de la tecnología blockchain al sector energético están entre las primeras que se afrontaron hace ya unos pocos años, y de vez en cuando rebrotan réplicas; o nuevas ideas relacionadas con el mercado energético en general o en particular con el peer-to-peer energy trading, las smart cities y las plataformas de comercialización.
Estas iniciativas no lo tienen fácil en un sector que ofrece jugosos lucros a compañías sobradamente bien establecidas (como por otra parte ocurre en otros sectores, como el bancario). Por eso son especialmente de agradecer desarrollos como este del estudiante mallorquín Sergio Bosch.
Un proyecto premiado en el IV TalenTIC de la UIB
Lo más llamativo es que hablamos de un trabajo de fin de grado, es decir, de un proyecto puramente teórico, que plantea (en el contexto del cambio en la legislación española del “impuesto al sol”) la opción de intercambiar excedentes energéticos eléctricos en una comunidad de vecinos.
Este TFG ha sido premiado con un segundo puesto en la cuarta edición (2019) de los premios TalenTIC de la Universitat de les Illes Balears (UIB), como leíamos en la publicación oficial de la casa. Tiene la virtud de plantear una solución perfectamente factible, gestionada a través de contratos inteligentes, para la automatización segura y económica de estas microtransacciones.
En un escenario en el que la energía eléctrica (un bien no tangible) puede cambiar de manos en cantidades mínimas, el modelo sin intermediarios, automatizado y transparente que permite la DLT es la solución perfecta. La simulación que forma el núcleo duro del TFG, realizado en el propio campus universitario balear, muestra el coste prácticamente cero del funcionamiento y mantenimiento de este sistema.
Llevar este modelo de funcionamiento y gestión a la realidad es, sin lugar a dudas, harina de otro costal. Estamos a costumbrados a ver ideas brillantes desvanecerse en la nada debido a problemas de inversión, complicaciones en el desarrollo o dificultades causadas por la regulación. Pero es muy probable que el común de los mortales esté más que dispuesto a implicarse cuando conozca sus virtudes…