La tecnología blockchain se está señalando como una de las herramientas más eficaces para combatir la COVID-19, tanto para certificar la salud de las personas como para rastrear sus contactos para tomar las medidas sanitarias necesarias. Existen ya diversas iniciativas y proyectos en ese sentido.
En este texto te presentamos una de las más consolidadas, hasta el punto de haber entrado en plena fase de operatividad desde el 15 de enero de 2020. Se llama “Jeju Safety Code” y es un sistema de rastreo individual puesto en marcha en la isla de Jeju, el emplazamiento más turístico de Corea del Sur.
Corea del Sur es un país que apuesta decididamente por la tecnología blockchain, como podemos ver en el caso de la gestión de los servicios públicos de Seúl o, sin apartarnos del ámbito sanitario, la gestión de la atención y los datos médicos. Era de esperar que los esfuerzos más serios en la encrucijada entre blockchain y COVID sugieran en un lugar como este.
Una app, un PIN y unos códigos QR
El trazado de contactos se realiza en la isla de Jeju (que registra la nada despreciable cifra de quince millones de visitantes anuales) mediante un compromiso entre la autoridad local y la compañía ICONLOOP, que emplea para ello su aplicación Zzeung, ideada inicialmente para servicios financieros, como nos cuentan en esta nota de prensa.
El funcionamiento del sistema es sencillo y eficaz. Los recién llegados a la isla se descargan la aplicación y al registrarse generan una credencial en una blockchain pública. Acto seguido verifican su identidad mediante una impresión digital o código PIN que genera una nueva credencial, esta vez en una blockchain privada. De esta manera no es necesaria la transmisión de datos privados de ningún tipo.
Con ambas credenciales en su móvil, la persona no tiene más que escanear los códigos QR que encontrará en tiendas, atracciones y emplazamientos turísticos (sin colas, sin aglomeraciones, sin costes para empresas o clientes) para que se asocie su itinerario a su credencial privada. En caso de declararse un caso, no hay más que cruzar datos…
Dentro del amplio espectro de negocio de la trazabilidad via blockchain, el rastreo de personas es especialmente espinoso. Si es posible hacerse (y eso parece) sin que ello afecte a la privacidad de los datos personales, estaríamos hablando de un gran paso adelante, dentro y fuera de la cuestión de la pandemia.