Antes de empezar a hablar de cadenas de bloques, una cosa: las abejas están en peligro, y eso es un problema urgente y potencialmente catastrófico. Por aquello de que comemos verduras, y que haya verduras depende de la polinización, y la polinización depende de las abejas, ya sabes cómo va la historia… Nunca está de más recordarlo.
Evidentemente, este alegato tiene algo que ver con el protagonista de este artículo, Techoney. Esta plataforma blockchain orientada a mejorar el posicionamiento comercial de los pequeños productores de miel es el resultado de un proyecto de investigación europeo en el que el centro CITA de Aragón tiene un papel destacado. Y el meollo de la cuestión está, claro, en la trazabilidad.
Consume la miel que quieres (y asegúrate de que lo es)
La miel es un producto altamente valorado (y con razón). Por ello la tentación de fraude es fuerte y, por desgracia, difícil de controlar. Así, con relativa frecuencia sufre de adulteraciones y malas prácticas todo en cuanto a la determinación de su procedencia. Y el mayor perjudicado es el pequeño productor.
¿Cómo poner en valor la miel de estos pequeños productores? Con un proyecto que incluye desde el análisis y la certificación de la miel hasta las reuniones colaborativas de los agentes de la cadena de suministro, pasando por un sistema de trazado y registro del producto fiable, ágil y seguro.
Nos quedamos con esto último porque, bingo, la tecnología elegida ha sido la DLT precisamente por su uso ya habitual en cuestiones de trazabilidad en el ámbito agroalimentario, entre otros. La blockchain permite autenticar, validar, gestionar y almacenar datos sobre la producción, el transporte y el consumo de la miel, garantizando el cumplimiento de los requisitos de calidad y buenas prácticas a través de contratos inteligentes.
Estamos ante una blockchain descentralizada y semipública; los nodos son propiedad de distintos actores del sector (desde los productores a los consumidores), los consumidores podrán consultar el origen y el análisis de la miel que compren, los integrantes de la cadena de suministro tendrán acceso a toda la información y se mantendrá el anonimato de los datos privados.
Resulta inspirador asistir a la integración de la tecnología blockchain de una forma plenamente funcional en un proyecto de un calado mucho mayor. Dicho de otra forma, usar blockchain aquí tiene todo el sentido, porque ayuda a sustentar un proyecto aportando un valor sólido, tangible, con potencial para mejorar la vida de las personas. Y si también mejora la de las abejas, muchísimo mejor.