Acaba de clausurarse la edición de 2018 de la Munich Security Conference (16-18 de febrero), un prestigioso evento anual dedicado a las políticas de seguridad que se viene celebrando en la capital bávara desde 1963, y al que asiste lo más florido de las instituciones internacionales, gobiernos nacionales y grandes compañías del sector de la seguridad. Y, cómo no podía ser de otra manera, la tecnología blockchain ha estado presente.
Este año ha acogido nada menos que 38 conferencias y mesas redondas de los principales líderes mundiales y especialistas en la materia, aparte de muchas otras intervenciones de menor calado; un fin de semana productivo en uno de esos foros donde se decide el futuro del mundo. ¿Quiénes y por qué han hablado de las cadenas de bloques?
La noticia saltaba porque varias empresas de primer nivel han firmado un Charter of Trust (una “Carta de Confianza”) para colaborar en la salvaguarda y protección del desarrollo industrial del IoT, el internet de las cosas, frente a ciberataques y otras amenazas virtuales y reales, con una ciberseguridad mejorada sobre la base de la tecnología blockchain. Los firmantes son IBM, Daimler, Allianz, Airbus y Siemens; no son precisamente unos desconocidos.
La protección del IoT y la verificación del control de armas, los temas estrella
Del mayor interés para los interesados en la tecnología blockchain fue también la ponencia de Sandra Rau en el seno del Programa de Embajadores Junior de la MSC. El título de la misma es esclarecedor: The Reinvention of Arms Control Regimes: Blockchain Verification Mechanism in Arms Appropriation. Para los poco amigos de la lengua de Shakespeare, una reflexión acerca de las posibilidades que ofrecen las cadenas de bloques para el control de la fabricación, distribución y venta de armas de fuego.
En efecto, un compromiso por parte de los fabricantes, los gobiernos y los propietarios para implementar la tecnología blockchain en el registro de armas implicaría un paso de gigante para poder seguir al detalle el itinerario de estas, dificultando sus utilizaciones ilegales, modificación, robo y reventa. No acabaría con el mercado negro de armas, pero ayudaría enormemente a reducirlo, introduciendo un elemento fiable de seguimiento y rastreo.
Si esta idea está lejos de su realización o no es algo que depende de los actores mayores del sector armamentístico y las autoridades gubernamentales. Pero no deja de ser una de las aplicaciones de la tecnología blockchain más brillantes y que ofrecería una clara mejora de la situación del género humano.