Hoy os traemos otro ejemplo de que cualquier industria es susceptible de mejorar aplicando la tecnología blockchain. La industria maderera española ha decidido sumar fuerzas y poner al día la cadena de suministro del sector a través de la creación de una solución tecnológica basada en la tecnología blockchain. Así informaba el Diario de Sevilla a mediados del pasado mes de julio.
Chainwood es una alianza entre empresas madereras, asociaciones y centros tecnológicos forestales y empresas TIC, entre otros actores. El objetivo común es hacer más eficiente el proceso productivo, desde la producción hasta la transformación, pasando por la compliance y la certificación.
Los procesos productivos asociados a la madera sólida, a la producción de celulosa o a la creación de biomasa se beneficiarán de mejoras en la trazabilidad, del abaratamiento de costes y la simplificación de trámites a lo largo de la supply chain del sector.
Qué es, cómo es, dónde está, dónde va
Los socios del proyecto han identificado las facetas del negocio que se pueden mejorar: transacciones, ubicación y estado de la materia prima, clasificación del producto, parámetros de calidad, acceso al mercado… En todos estos puntos cabe mejorar aplicando las novedades tecnológicas de la DLT.
Aunque el “núcleo duro” del proyecto se sitúa en Galicia, Asturias y Castilla y León, también hay participantes externos radicados en Madrid (Accuro, Indra), Andalucía (CTA) e incluso Finlandia (Risutec) que aportan su saber hacer a la parte más técnica del proyecto.
La hoja de ruta se encuentra en el momento del diseño de la arquitectura de la plataforma blockchain, que ofrecerá a los participantes datos de mayor calidad y con todas las garantías, la automatización de ciertos procesos y operaciones, y un mercado más ágil, accesible y seguro.
Los próximos pasos serán el desarrollo de la solución tecnológica en sí misma y su integración en los modelos de negocio existentes; la puesta a prueba de la plataforma ante los desafíos específicos que se plantean en cada caso en el mundo real; y, finalmente, la divulgación de las mejoras puestas en marcha.
Productores, explotadores, transformadores, empresas de logística, autoridades y administración pública, todos saldrán beneficiados de la puesta en marcha de estas mejoras, que harán al sector más competitivo, más transparente y más consciente en cada una de las etapas que sigue la madera desde el monte a la tienda.