Tanto si miramos los grandes números macroeconómicos mundiales como si echamos un ojo a cualquier calle o plaza de nuestra geografía cercana constataremos lo que ya todo el mundo sabe: China y los chinos son los amos del cotarro económico en este inicio del siglo XXI. Y tiene pinta de ir para largo…
Hace unos días Mar Calvo se hacía eco en este mismo blog del desarrollo de la zona blockchain de Hainan, en el sur de China. Hoy, leyendo este artículo de Dalmas Ngetich, todas las piezas del puzle parecen encajar con una armonía que haría las delicias del Hijo del Cielo, o de quienquiera que haya heredado su posición al mando del Imperio del Centro.
Parece claro que hay una estrategia nacional china de dominación en torno a la tecnología blockchain. Una estrategia que está sorprendiendo a los extraños, léase occidentales, porque los propios saben de sobra cómo rige la maquinaria mental del país y sus dirigentes.
Poca criptomoneda, mucha tecnología
Hace un tiempo ya que China restringió severamente el uso de criptomonedas, proscribió las ICOs y arruinó varias plataformas de cambio. ¿Es contradictorio con el boom de la tecnología blockchain que, como estamos viendo, viene de auspiciar? Ni mucho menos. China apuesta por la contabilidad distribuida, pero controla férreamente las criptomonedas que, como sabemos, no son lo mismo.
Es impresionante el número de patentes relacionadas con la tecnología blockchain que están registrando las principales multinacionales chinas; superan con creces a cualquier competidor de otro país. A este ritmo, el dominio chino de la tecnología blockchain será evidente en menos de un lustro.
Un dominio que, a medio plazo, probablemente sí se vea reafirmado a través de una criptomoneda… nacional. Una especie de tether, respaldada por la moneda fiduciaria china de siempre, el yuan, y que daría al gobierno chino un gran control (o un gran beneficio, al menos) sobre las transacciones descentralizadas chinas.
La desautorización de la libertad de uso de criptomonedas, una fuerte apuesta por la investigación y una criptodivisa soberana son, como hemos visto, los tres pasos elementales del plan chino para la dominación de la blockchain. El primero ha sido dado, el segundo se está dando. Cuando se haya dado el tercero… Ya veréis, ya…