Ya no hace falta ser herrero, orfebre, esclavo o gladiador ciberpunk para trabajar con cadenas. Ni albañil o diseñador de LEGO para trabajar con bloques. Ahora puedes encontrar un trabajo con gran facilidad en un buen puñado de sectores si adquieres buenas competencias en el ámbito de la tecnología blockchain.
No es que sea una novedad; ya analizando sus datos de 2017, la potente plataforma/red social de empleo, LinkedIn, llamó la atención sobre el fenómeno: la demanda de personas cualificadas en torno a la tecnología blockchain se había triplicado en ese año. Con sueldos más que interesantes, por cierto. La cosa no tiene pinta de cambiar, porque en lo que va de 2018 la demanda se incrementa progresivamente.
Antes de que digas eso de “esto es para programadores, frikis y cerebritos”, ¡para el carro! Sí, pero también para otros perfiles. Cierto es que se necesitan técnicos que sepan programar, sobre todo en las nuevas arquitecturas como Solidity, y que entiendan cómo diseñar y desarrollar aplicaciones, componentes, interfaces y demás. Pero también hacen falta abogados, economistas, comerciales, ejecutivos, gente de la banca, las aseguradoras, las farmacéuticas, el sector del ocio…
Es el momento perfecto para ponerse las pilas y trabajar con blockchain
Para prueba, un botón. O dos. Esta mañana he hecho un par de búsquedas en un par de portales de empleo (los primeros que me han aparecido en el buscador). Puedes verlas aquí y aquí. Podrás ver que se pide mucho ingeniero, programador y desarrollador, pero también agentes de marketing, coordinadores de proyectos educativos, investigadores, gestores, estadísticos e incluso estudiantes…
La propia naturaleza de la tecnología blockchain explica esta diversidad. Los técnicos saben construir, pero corresponde a los miembros de los demás nichos profesionales identificar las oportunidades de aplicación de esta tecnología. Ya sabemos que en los sectores financieros, inmobiliarios y de seguros, entre otros, las cadenas de bloques han llegado para quedarse, pero quedan muchos ámbitos de aplicación por descubrir…
Parece ser que la implementación de las cadenas de bloques será irreversible allá por 2021. En un par de años, vaya. No es que para entonces sea tarde (al contrario), pero cualquier experiencia previa será una ventaja comparativa decisiva. Aprender cuanto antes a trabajar con blockchain puede facilitarnos mucho las cosas en el mercado laboral. Y si no me crees, al tiempo.