Sin lugar a dudas la escalabilidad sigue siendo uno de los grandes desafíos para la adopción generalizada de la tecnología blockchain en los entornos de producción en el mundo real (he aquí una buena explicación sobre el tema, centrado en criptodivisas). ¿La Setchain de IMDEA podría venir a resolver el dilema?
En efecto, la escalabilidad es, junto a la seguridad y la descentralización, las tres patas que sustentan una blockchain óptima; y tal vez sea la pata más débil (también lo piensa Berners-Lee), ya que es difícil para una tecnología basada en la validación de transacción mediante consenso… y el orden. Este último es el asunto clave de hoy: ¿hasta qué punto es posible una blockchain segura y descentralizada sin un orden total?
Nosotros no sabríamos decirte, francamente, pero desde IMDEA plantean una posible solución en este artículo: un “orden relajado” basado en objetos de conjunto de solo crecimiento (grow-only set object). Y lo han llamado Setchain; parece que los programas de investigación del Instituto Madrileño de Estudios Avanzados ya están generando buenos frutos…
Setchain para dummies
El artículo en cuestión es tirando a sesudo, así que vamos a intentar (optimistas que somos) presentar la idea central del mismo en tres párrafos.
Es sabido que la DLT exigen un orden en los bloques y las transacciones de cada bloque; pero que las aplicaciones más modernas de los smart contracts no requieren un orden total entre todas las operaciones en las que intervienen; ¿sería posible resolver ese dilema, agilizando los procesos (y permitiendo así una mayor escalabilidad)?
La clave podría estar en el salto del “orden total” a un orden relativo o parcial basado en objetos de conjunto cuyos elementos no estén ordenados cronológicamente entre sí, pero sí respecto a otros elementos, mediante un “número de época”. En palabras del artículo: “Setchain allows forcing a synchronization barrier that assigns permanently an epoch number to a subset of the latest elements added”.
Por tanto, dos operaciones en la misma época no estarían ordenadas, lo que permitiría “tocarlas”, validarlas mediante barreras de sincronización cada cierto tiempo e implementar así soluciones de contratos inteligentes con una agilidad nunca vista en las blockchain convencionales. Ordenar los bloques, no las transacciones, vienen a explicarnos.
Nos colocamos así a las puertas de un escenario con muchísimas, pero muchísimas transacciones por minuto posibles, evitando además el problema del front running. Y sería aplicable no solo a Tezos (cuya fundación colabora con IMDEA), en la que ya se ha probado, sino potencialmente en cualquier blockchain. Sería una verdadera revolución…