Para hacer un coche hacen falta un montón de piezas. Hay que diseñarlas, hacerlas, distribuirlas y montarlas. Son muchas ocasiones para meter la pata. Además, esas piezas deben cumplir con rigurosos criterios de cumplimiento normativo (la dichosa compliance) ante diferentes entidades públicas y privadas. El más difícil todavía.
Nada nuevo para cualquiera familiarizado con el concepto de supply chain o cadena de suministro, en la que son muchas las partes implicadas en los diferentes momentos por los que pasa la elaboración de un determinado producto. Para quienes estén familiarizados con los puntos de contacto entre la tecnología blockchain y esta cadena, lo extraño es que todavía no estuviera implementada dicha plataforma.
Pero es que no es cosa fácil… ¿Te has parado a pensar por cuántas manos pasa cada tornillo de tu coche? ¿Cuántas empresas distintas, cuántos puertos, cuántos procesos de certificación para verificar su calidad? ¿Qué volumen de documentación, esperas y costos implica? Agilizar esos procesos de manera económica y segura es el objetivo de XCEED.
La trazabilidad de piezas de automóviles, resuelta
La gente de Renault nos lo explica todo aquí con mucha claridad (aunque en inglés). Renault y un buen número de sus proveedores de piezas de automoción (Knauf Industries, Faurecia, Simoldes y Coşkunöz) han desarrollado junto a IBM (y eso que le pasaba algo) y sobre la tecnología Hyperledger Fabric un proceso de trazabilidad end-to-end que, esta es la noticia, salta del testeo en la planta de Douai al pleno funcionamiento en Palencia y Bursa.
La tecnología blockchain puede resolver de manera muy ágil los requisitos de certificación y transacción entre las partes implicadas en la cadena, sin comprometer cuestiones como la propiedad intelectual, la confidencialidad y la propiedad de los datos. Cada nuevo paso queda registrado y ese registro distribuido garantiza su inmutabilidad y elimina la necesidad de procedimientos más farragosos. Buena parte de la tarea se automatiza (incluyendo chequeos y alertas en tiempo real).
El caso es que se veía venir. Desde 2019, Renault ya participa en el consorcio MOBI, en el que ya estaban implicados también IBM e Hyperledger entre muchos otros. La cadena de suministro es solamente una de las facetas del negocio de la automoción que se está beneficiando de la tecnología blockchain; el carsharing, el consumo eléctrico o el registro de datos de conducción son algunos de los otros ámbitos de aplicación.
Esta implementación implica toda una pequeña gran revolución en el sector. Implantada en la nube (IBM Cloud), tiene margen para incorporar a otros fabricantes y proveedores de piezas. XCEED promete crecer: seguro que volvemos a hablar de ello.